Desde donde recuerdo, siempre quise dedicarme a este oficio. Creo que es a causa de mi carácter impaciente, no podría esperar a ver una obra terminada durante meses, días o semanas, pero en cocina se puede apreciar el resultado enseguida. Eso es lo que me seduce: me atrae el colorido, las formas, la transformación que sufre el producto, es como una escultura o un cuadro, por eso, quizás, llaman a cierta cocina un “arte”.
Después de tantos años llego a la conclusión de que sí, rotundamente lo es, pero sin más pretensiones que sorprender o agradar, del mismo modo en que hoy día nos divertimos en el teatro, en el cine, en un evento, en un espectáculo… o en un restaurante. Y así lo entendemos aquí, aunque libres del deseo de caer en modas; la cocina no es una moda sino la percepción cultural y educativa con la que ha crecido cada uno que se dedique a ella. Sobre todo, lo más importante para mí es el trabajo colectivo de un equipo que traduce tus ideas, tu propia visión de esa cocina que tienes en la cabeza, esa es en realidad la clave de tu talento: la capacidad de trasmitir a los demás lo que ideas o imaginas, tu fantasía sobre el producto.
Un trabajo en equipo
El contexto idílico donde desarrollas tu cocina y la libertad de proponer unas ideas, es el fruto de la firme convicción del equipo que te apoya y te brinda esa oportunidad, y sin los que tales cosas serian imposibles. Sucede que habitualmente nos olvidamos de la gente que invierte y cree en tus ideas porque el protagonismo lo acaparas tú. Sin embargo, sin esa libertad y ese apoyo no existirían resultados satisfactorios. Para ello hacen falta por igual el talento para apostar por tus propuestas y la financiación para llevarlas a cabo. De nuevo surge el concepto de “equipo”.
Le Nailhac
No hay criterio más sencillo: producto, más producto, algo de técnica y mucha reflexión. Esa es la definición de nuestras propuestas culinarias, aquí no hay efectos especiales, mezclas dispares de sabores, menús interminables que, a mi juicio, acaban por confundir al paladar, sino ensamblaje de sabores relacionados entre sí, texturas diferentes para divertir el paladar, armonía y equilibrio entre los salados y los dulces, lo amargo y lo ácido… No mezclamos al azar, sino respetando la procedencia, la selección y la composición de cada producto.
Una apuesta segura
Le Nailhac es más que un restaurante, venir al Nailhac es venir a casa de unos amigos cuya única misión es hacer feliz a tu paladar a través de nuestra dedicación exclusiva y plena, para que compartas con nosotros el placer que ofrece la cocina hecha “arte”. Humildemente, nuestra pasión y entrega no tiene otra función.
Horario
Le Nailhac abre de jueves a sábado, de 20:00 a 23:00. Para más información y reservas llame al +34 952 473 050.
Sobre el Hotel Byblos Guadalpin
Situado en la población de Mijas Costa, entre Málaga y Marbella, el Hotel Byblos Guadalpin, hotel cinco estrellas “Gran Lujo”, dispone de 144 soleadas habitaciones que son renovadas cada año. De estilo andaluz, combinando elementos árabes y occidentales, con bellos patios y fuentes, el refinado ambiente del hotel lo convierten en un claro ejemplo de la perfecta armonía entre una construcción de primer orden y unas instalaciones de lujo.
Pionero en la aplicación de terapias marinas en España, el hotel cuenta con el instituto de Talasoterapia más avanzado de Europa, elegido el Mejor Spa Europeo por Conde Nast Johansens en 2005, además de seis salones de congresos dotados de lo último en tecnología para la celebración de todo tipo de eventos privados y de empresa. La oferta del hotel se completa con cuatro restaurantes y dos campos de golf de 18 hoyos, sumando más de cinco kilómetros de recorrido.
